Drogas y adicciones: un obstáculo para el desarrollo humano integral

Conferencia Internacional, Ciudad del Vaticano 29-30 de noviembre - 1 de diciembre de 2018

Drogas y adicciones: un obstáculo para el desarrollo humano integral

El fenómeno de las drogas constituye un problema que causa preocupación en el mundo actual y requiere análisis y acciones serias. El azote de las drogas - dijo Papa Francisco hablando a los participantes de la 31ª edición de la Conferencia Internacional para el Control de Estupefacientes, el 20 de junio de 2014 - "continúa a ensañarse con fuerza y de manera impresionante". Se trata -añadió- de un fenómeno alimentado, no sin concesiones ni compromisos de parte de las instituciones, por "un mercado innoble, que va más allá de las fronteras nacionales y continentales". En varias ocasiones, el Santo Padre ha reiterado que el problema del narcotráfico favorece la violencia y propaga el sufrimiento y la muerte, y por esta razón, es necesario un acto de valentía de parte de la sociedad.

Para contribuir a la comprensión y a la búsqueda de respuestas adecuadas al fenómeno, el Dicasterio para el Servicio del Desarrollo Humano Integral organizó una conferencia internacional sobre el tema "Drogas y adicciones: un obstáculo para el desarrollo humano integral", que se celebró en el Vaticano el 29 y 30 de noviembre y el 1 de diciembre de 2018.

La Conferencia reunió a expertos de todo el mundo, organizaciones internacionales, especialistas provenientes de iglesias locales y personas que trabajan en centros de rehabilitación, para analizar las áreas complejas del uso y el tráfico de drogas, así como otras adicciones, entre las cuales la adicción a Internet, la pornografía, el sexo y los juegos de azar, aprendiendo de las varias experiencias y de las mejores prácticas, sobre la prevención, la lucha, el tratamiento y la rehabilitación.

La Conferencia ha centrado su atención, entre otras cosas, en los esfuerzos y ejemplos de prevención, rehabilitación y reintegración que llevan las personas a descubrir la dignidad auténtica, tanto de los seres humanos que, de los miembros de una sola familia de los hijos de Dios, un elemento esencial para la promoción del desarrollo auténtico e integral.

10 diciembre 2018